¿Qué es la diabetes tipo II?
¿Qué es la diabetes
tipo II?
La diabetes tipo
II, o simplemente diabetes trata de una enfermedad metabólica caracterizada por
elevados niveles de glucosa(Azúcar) en la sangre debido a una resistencia
celular a las acciones de la insulina, la cual no puede penetrar en la célula.
Esta acumulación en sangre provoca daños en los órganos como son: riñones,
corazón nervios y vasos sanguíneos provocando hiperglicemia en el organismo
viviente. La deficiente disponibilidad de la insulina conlleva a un deficiente
metabolismo celular que produce aumento de los ácidos grasos y de los niveles
circulantes de triglicéridos, además de un descenso de las lipoproteínas de
alta densidad (HDL).
Los factores
desencadenantes de la enfermedad son:
- Intolerancia a
la glucosa previamente diagnosticada.
- Presión
arterial alta (hipertensión).
- Dieta
deficiente.
- Peso excesivo
(especialmente alrededor de la cintura).
- En el
laboratorio clínico se encuentran las lipoproteínas de alta densidad con un
valor menor de 35 mg/dl o niveles de triglicéridos superiores a 250mg/dl.
(dislipidemia).
Los síntomas
clínicos que se presentan son:
En los estados
iniciales de la enfermedad no hay síntomas clínicos y los que se presentan en
etapas tardías son: visión borrosa, fatiga, nauseas, vómito, aumento del
apetito (polifagia) sed excesiva (polidipsia), aumento de la frecuencia de la
micción (poliuria), la piel se torna seca, hay síntomas urológicos como son
vaginitis en la mujer y en el hombre se puede presentar: balanitis, disfunción
eréctil, así como impotencia sexual. Hay datos de polineuritis en el sistema
nervioso con síntomas clínicos como entumecimiento de pies y manos, las cortaduras de las
heridas tardan en cicatrizar.
Otros datos de síntomas neurológicos del sistema nerviosos
central pueden incluir la presencia de depresión mental.
Diagnostico:
Para realizar el
diagnóstico se realizan pruebas de laboratorio como tomas de glicemia en ayuno (éste se define como la no ingesta calórica
durante por lo menos 8 horas.), que no deben exceder de 120mg/dl (7 mmol), toma
de glicemia (con 2 horas posprandial) la
prueba se realiza con una carga de hidratos de carbono equivalente a 75 grs
de glucosa, si la glucosa en sangre
excede los 200mg/dl y el enfermo presenta los síntomas mencionados se verifica
el diagnóstico de diabetes mellitus. Se realizan análisis de orina buscando
glucosa en orina (glucosuria) así como la presencia de cuerpos cetónicos. Se
miden los niveles de hemoglobina glicosilada en donde es diagnóstica si los
valores son mayores a 6.5%, esta prueba mide cenata glucosa se ha estado
adhiriendo a los glóbulos rojos y también es indicador de complicaciones en el
sistema cardiovascular del organismo; se deben realizar cada 3 o 6 meses. Los
valores de Colesterol, Lipoproteínas de baja y alta densidad, colesterol así como electrocardiograma.
El exámen
oftalmológico es importante porque verifica a través del exámen de fondo de
ojo, las condiciones de la retina para prevenir retinopatía diabética,
desprendimiento de retina, glaucoma y cataratas.
La revisión del estado de los
pies es importante ya que se debe verificar que no existan cambios de
coloración de los pies, que se encuentre lubricada la piel, si existen
callosidades o heridas verificar su estado, si existen la presencia de coloración
azul o violácea son datos de necrosis o muerte celular que pueden indicar la
posterior amputación del pie; ya que existe una complicación denominada pie
diabético.
Las
complicaciones que se pueden presentar son de tipo agudo y crónico.
Complicaciones
de tipo agudo:
- Hipoglicemia.-
se presenta una disminución del nivel de glucosa (azúcar) en sangre por debajo
de 50mg/dl. Presentando síntomas clínicos como son: mareos, confusión y visión
borrosa.
- Cetoacidosis y
como diabético.- La elevación patológica de la glucosa mayor a 250mg/dl, eleva
la osmolaridad sanguínea causando un desequilibrio entre los electrolitos que
se encuentran dentro y fuera de la célula como son el sodio, potasio, cloro,
calcio, y magnesio principalmente provocando deshidratación en la célula,
alteraciones del metabolismo de la misma, diuresis (aumento en el número de micciones),
lo que puede poner en riesgo la vida del ser humano.
Complicaciones
de tipo crónico:
- Daño a los
vasos de pequeño calibre (microangiopatía), así como daño a los vasos
sanguíneos de grueso calibre (macroangiopatía) lo que puede ocasionar trastornos
en la circulación sanguínea, infartos, o ya sea que un coágulo obstruya alguna
arteria presentando un infarto.
- Daño de los
nervios periféricos ocasionando síntomas como se explicaron previamente con
datos de polineuropatía diabética.
- Pie diabético.-
las heridas son dificilmente curables ya que existe pérdida de la sensibilidad
dolorosa y térmica, hay mal irrigación sanguínea, pueden presentarse datos de
necrosis tisular (tejidos) lo que puede llevar a la amputación de algunos dedos
o del mismo pie.
- Retinopatía
diabética.- daños a la retina con síntomas de visión borrosa, presencia de
cataratas o glaucoma complicaciones que ponen en riesgo la visión ocular.
- Nefropatía
diabética.- hay daño renal que puede evolucionar a la insuficiencia renal crónica
terminal.
- Esteatosis
hepática.- existe la presencia de depósitos de grasa en el hígado lo cual puede
comprometer la función del mismo.
-Daño Cerebral
vascular.- un coágulo puede obstruir alguna de las arterias ocasionando un
infarto cerebral.
- Cardiopatía
diabética.- se puede obstruir alguna de las arterias coronarias ocasionando
infarto al miocardio.
- Dermopatía
diabética.- la resequedad en la piel, falta de sensibilidad térmica táctil y al
dolor son algunas de las alteraciones.
- Hipertensión
arterial.- por la mala irrigación sanguínea y las alteraciones ya mencionadas
en los vasos de grueso y pequeño calibre.
Tratamiento
El tratamiento
debe incluir dieta más ejercicio, tratamiento con medicamentos, así como
tratamiento de piel y pies en general.
- Dieta: aporte
calórico adecuado: 50- 60% de carbohidratos, 10 a 15% de proteínas, 20 a 30% de
grasas, ésta debe ser fraccionada cada 3 o 4 horas para evitar la hipoglicemia
o disminución de la glucosa en sangre. Los alimentos que se deben evitar
completamente son: azúcar, miel, melaza, postres endulzados, helados,
mermeladas, dulces en general y gaseosas.
- El ejercicio
se debe realizar de 1 a 20 minutos 2 veces a la semana a la misma hora para
que el cuerpo se acostumbre a una rutina de ejercicios, permitiendo también el
quemar calorías.
- En cuanto al
cuidado de la piel, esta se debe de asear con jabón suave y neutro, mantenerla
bien lubricada, en los pies examinarlos diario para observar cualquier dato de
muerte o necrosis tisular ya mencionada en el diagnóstico.
Escrito por Dra.
Rocío Arias Díaz.
1326209 UNAM.