¿Por qué besamos?
¿Sabías que compartimos cerca de 80 millones de bacterias durante 10 segundos de un beso apasionado? Pareciera que besarnos no es una actividad muy saludable que digamos. Pero según los estudios, tenemos más probabilidades de enfermar a través de un apretón de manos que por un beso.
Siendo sinceros creo que a la mayoría de las personas no nos importan todas esas bacterias. Besar es una actividad sumamente importante en el desarrollo de las relaciones significativas, e incluso tomamos decisiones importantes a partir de cómo nos sentimos durante el primer beso, como por ejemplo: elegir a una pareja. Según una encuesta de la Universidad de Nueva York, el 50% de los hombres y el 66% de las mujeres dijeron que habían terminado una relación porque los besos no habían sido satisfactorios.
Pero no solo besamos a nuestras parejas románticas. Si hacemos un breve análisis de nuestra vida encontraremos que nuestras primeras experiencias de seguridad y de amor generalmente estuvieron relacionadas con los movimientos de presión de labios y de estimulación a través de movimientos que imitan un beso: mamar y tomar la leche de un biberón, por ejemplo.
Los besos activan un torbellino de sensaciones

Un beso apasionado puede incrementar drásticamente la producción de dopamina (neurotransmisor asociado al deseo), oxitocina (¨hormona del amor¨ que fomenta el sentido de cercanía y apego), adrenalina (hormona que aumenta nuestro ritmo cardíaco y hace que sintamos calor), los vasos sanguíneos se dilatan, la respiración se profundiza y nuestras mejillas se sonrojan.
Como puedes ver, los besos producen esas sensaciones que a menudo describimos cuando estamos enamorados. De esta manera, un beso puede iniciar una relación romántica, pero también puede solidificar los lazos que compartimos con nuestros amigos y familiares. No necesariamente tienen que ser en los labios, si no que besamos de distintas maneras: en la boca, en la mejilla, en la frente, etc. Los besos están intrínsecamente ligados a los momentos más importantes y significativos de nuestra vida.
Ya sabes, no lo dudes, besa a todas las personas que son significativas para ti. Además de lo bien que se siente para ambas partes, ahora también tienes datos científicos para decir que así fortaleces tus relaciones con tu pareja, tus amigos y tu familia, porque un beso muchas veces vale más que mil palabras.
Fuente: Psyciencia